Más de 600.000 agricultores regantes de toda España han incorporado a finales de 2008 a las nuevas tecnologías para gestionar cerca de 300.000 hectáreas de regadío, ahorrando recursos de agua y energía en el desarrollo de su actividad diaria. Alrededor de 140 comunidades de regantes difunden información urgente sobre averías o incidencias mediante web, correo electrónico o mensajes SMS; a través del proyecto corenet que entró en funcionamiento en el año 2006, financiado por el ministerio de ciencia y tecnología y el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDEA).
Esta plataforma de servicios en la red, ha mejorado la competitividad de los regantes mediante la incorporación de las nuevas tecnologías a sus tareas más cotidianas, permitiéndoles incluso realizar labores que hasta hace poco años nos parecerían de ciencia ficción, como por ejemplo, regar sin estar presente en la parcela o ajustar las necesidades de riego a través de Internet en función del tipo de cultivo, suelo e incluso la meteorología prevista.
Durante el año 2007, cerca de 100.000 agricultores y 70 comunidades de regantes representativas de 200.000 hectáreas hicieron uso de estos nuevos servicios nuevos y tecnologías con el fin de optimizar al máximo su actividad. En el año 2008 se llegaron a más de 600.000 agricultores y cerca de 300.000 hectáreas. En 2009 se espera incrementar exponencialmente el ritmo por la modificación del programa en cuanto a estructura y forma de conocimiento.
Según los expertos del programa, tradicionalmente se ha llevado a cabo una gestión administrativa por procedimientos muy manuales y ahora están pidiendo a los regantes que cambien el chip y empiecen a pensar en gestionar sus parcelas orientándose a un mejor uso de los recursos, agua, contaminación y energía. Según ellos es un cambio importante que hay que afrontar progresivamente. No obstante, la buena acogida que han tenido estos sistemas de gestión viene avalada por el hecho de que hayan sido las propias comunidades de regantes las han solicitado la integración de servicios nuevos, tales como oficinas electrónicas a las que poder acceder desde sus teléfonos móviles con el fin de consultar en tiempo real la situación de sus cultivos o riegos. Además, la aplicación de las nuevas tecnologías al campo ha contribuido a que las generaciones más jóvenes se sientan atraídos por las labores del campo, asegurando el relevo generacional (en la actualidad, más de la mitad de los agricultores españoles superan los sesenta años de edad) en el sector agrario, así como la continuidad de trabajos que, de otro modo, podrían haber desaparecido.
Las regiones españolas propias de regadío, son las más tecnificadas son aquellas que tienen más hectáreas de regadío y afectadas, por tanto, en mayor grado por la sequia. Por ello Andalucía, la Comunidad Valenciana, Murcia, Extremadura y Aragón, son las regiones que cuentan con un porcentaje mayor de regantes integrados en esta red. Por el contrario, las comunidades del norte peninsular, como son País Vasco, Castilla y León, Cantabria y Asturias, que gozan de un mayor índice de pluviometría, son las comunidades que más lentamente están aplicando estos sistemas de gestión a través de Internet.
Proyecto Corenet permite además de tener interconectados a miles de regantes y que estos sean informados en su teléfono móvil por SMS y mediante correo electrónico de cualquier incidencia urgente, como averías en sus cultivos ó conocer con antelación el tiempo previsto y la cantidad de agua que posee la cuenca para sus cultivos asimismo incluye comparativas de indicadores básicos, tales como el consumo energético o la tarifa contratada, de manera que los propios regantes puedan autoevaluarse y realizar los cambios que estimen oportunos para garantizar una gestión más eficiente del agua y la energía.
En definitiva toda la tecnología al servicio de uno de los colectivos más sacrificados y como mayor número de variables de nuestro mercado laboral.
Esta plataforma de servicios en la red, ha mejorado la competitividad de los regantes mediante la incorporación de las nuevas tecnologías a sus tareas más cotidianas, permitiéndoles incluso realizar labores que hasta hace poco años nos parecerían de ciencia ficción, como por ejemplo, regar sin estar presente en la parcela o ajustar las necesidades de riego a través de Internet en función del tipo de cultivo, suelo e incluso la meteorología prevista.
Durante el año 2007, cerca de 100.000 agricultores y 70 comunidades de regantes representativas de 200.000 hectáreas hicieron uso de estos nuevos servicios nuevos y tecnologías con el fin de optimizar al máximo su actividad. En el año 2008 se llegaron a más de 600.000 agricultores y cerca de 300.000 hectáreas. En 2009 se espera incrementar exponencialmente el ritmo por la modificación del programa en cuanto a estructura y forma de conocimiento.
Según los expertos del programa, tradicionalmente se ha llevado a cabo una gestión administrativa por procedimientos muy manuales y ahora están pidiendo a los regantes que cambien el chip y empiecen a pensar en gestionar sus parcelas orientándose a un mejor uso de los recursos, agua, contaminación y energía. Según ellos es un cambio importante que hay que afrontar progresivamente. No obstante, la buena acogida que han tenido estos sistemas de gestión viene avalada por el hecho de que hayan sido las propias comunidades de regantes las han solicitado la integración de servicios nuevos, tales como oficinas electrónicas a las que poder acceder desde sus teléfonos móviles con el fin de consultar en tiempo real la situación de sus cultivos o riegos. Además, la aplicación de las nuevas tecnologías al campo ha contribuido a que las generaciones más jóvenes se sientan atraídos por las labores del campo, asegurando el relevo generacional (en la actualidad, más de la mitad de los agricultores españoles superan los sesenta años de edad) en el sector agrario, así como la continuidad de trabajos que, de otro modo, podrían haber desaparecido.
Las regiones españolas propias de regadío, son las más tecnificadas son aquellas que tienen más hectáreas de regadío y afectadas, por tanto, en mayor grado por la sequia. Por ello Andalucía, la Comunidad Valenciana, Murcia, Extremadura y Aragón, son las regiones que cuentan con un porcentaje mayor de regantes integrados en esta red. Por el contrario, las comunidades del norte peninsular, como son País Vasco, Castilla y León, Cantabria y Asturias, que gozan de un mayor índice de pluviometría, son las comunidades que más lentamente están aplicando estos sistemas de gestión a través de Internet.
Proyecto Corenet permite además de tener interconectados a miles de regantes y que estos sean informados en su teléfono móvil por SMS y mediante correo electrónico de cualquier incidencia urgente, como averías en sus cultivos ó conocer con antelación el tiempo previsto y la cantidad de agua que posee la cuenca para sus cultivos asimismo incluye comparativas de indicadores básicos, tales como el consumo energético o la tarifa contratada, de manera que los propios regantes puedan autoevaluarse y realizar los cambios que estimen oportunos para garantizar una gestión más eficiente del agua y la energía.
En definitiva toda la tecnología al servicio de uno de los colectivos más sacrificados y como mayor número de variables de nuestro mercado laboral.
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